Después de la cena, cuando las luces titilantes se apagaron y el ambiente se volvió tranquilo, Ferit tomó la mano de Seyran y la condujo al balcón. La luz de la luna bañaba todo el cielo, iluminando sus rostros y haciendo que todo a su alrededor pareciera detenerse. La brisa suave acariciaba el cabello de Seyran, trayendo consigo el aroma de las flores y la tierra, creando un ambiente romántico y sereno. Ferit miró a Seyran con ternura y dijo: “Quiero que bailemos, solo un baile lento, sin música, solo con los latidos de nuestros corazones.”
Seyran vaciló al principio, sintiendo una ligera preocupación en su interior, pero la mirada de Ferit la hizo incapaz de rechazarlo. Sonrió suavemente y puso su mano en la de él. Sus dedos se entrelazaron, cálidos, como si hubieran esperado este momento durante mucho tiempo. Comenzaron a bailar, paso a paso, lentamente, como si se movieran en un espacio ajeno al tiempo. No hacía falta hablar, solo había un silencio entre ellos, un silencio lleno de significado, como una promesa silenciosa de que no se separarían nunca.
Ferit susurró, con voz suave y sincera: “Solo quiero ver esta sonrisa para siempre.” Esas palabras, llenas de amor y un deseo genuino, fueron como una afirmación de que, aunque hubieran pasado por tantas dificultades y pruebas, él seguía dispuesto a estar a su lado, sin rendirse. Seyran sintió la sinceridad y la profunda confianza en sus ojos, lo que la hizo sentirse en paz. Asintió levemente, como una aceptación silenciosa de que comenzarían de nuevo, dejando atrás todas las heridas y sufrimientos del pasado.
Cuando el baile terminó, se quedaron quietos en los brazos del otro, mirándose sin necesidad de palabras. La sensación de amor y confianza se hacía fuerte entre ellos, como un lazo indestructible. Seyran sintió su corazón cálido, como si se estuviera curando en ese momento. Y Ferit, al mirarla, experimentó una felicidad simple pero profunda, sabiendo que se habían encontrado de nuevo, que podían caminar juntos hacia un nuevo capítulo de sus vidas, lleno de esperanza y amor.