Ricardo, atormentado por el peso de la verdad, observa a Catalina sumida en una profunda tristeza. La joven marquesa es víctima de una conspiración que la ha dejado al borde del abismo, y él, el único que conoce la verdad, se siente impotente. La culpa lo corroe por dentro, y la imagen de Catalina sufriendo lo atormenta día y noche. Mientras tanto, en la cocina de La Promesa, el Padre Samuel se convierte en una figura de esperanza. Al ver el caos y la desesperación que reina en la casa, el sacerdote decide intervenir. Organiza un pequeño banquete para los criados, en el que comparte palabras de aliento y los invita a unirse en oración. Su ejemplo inspira a muchos, quienes encuentran en él una fuerza para seguir adelante.
En otro rincón de la mansión, Cruz, siempre atenta a los chismes y intrigas, comienza a sospechar de Catalina. Convencida de que la marquesa esconde algún secreto, Cruz no duda en sembrar la discordia entre los miembros de la familia. Alonso, cegado por la ira y la humillación, amenaza con desterrar a Pelayo si este regresa a La Promesa. Sin embargo, un giro inesperado en la trama cambiará por completo el rumbo de los acontecimientos. Jana y Manuel, motivados por su deseo de ayudar a Catalina, realizan una investigación en secreto y descubren una verdad sorprendente: el hijo de Catalina no es hijo de Alonso. Esta revelación no solo sacude los cimientos de la familia, sino que también pone en peligro la vida de todos los involucrados.
Ricardo, al enterarse de este nuevo descubrimiento, se da cuenta de que ha llegado el momento de actuar. Decide confesar todo a Catalina y ofrecerle su ayuda para enfrentar las consecuencias de esta revelación. Juntos, buscarán la forma de demostrar la verdad y limpiar el nombre de Catalina. Mientras tanto, Cruz, al ver que sus intrigas están a punto de ser descubiertas, redobla sus esfuerzos para sembrar el caos y mantener a Catalina alejada de la verdad.
La tensión aumenta a medida que los secretos se revelan y las alianzas se rompen. La Promesa se convierte en un escenario de intrigas, traiciones y emociones a flor de piel. ¿Podrán Ricardo y Catalina superar todos los obstáculos y encontrar la felicidad? ¿Cruz logrará salirse con la suya o será finalmente desenmascarada? Las respuestas a estas preguntas marcarán el destino de todos los personajes.